Por la tarde hemos visitado la estación Akademik Vernadsky: está situada en la isla Galindez, en las islas Argentinas. Fue comprada por Ucrania a UK por una libra, pues era más fácil venderla que desmantelarla. Esta estación empezó a funcionar en 1947 y fue aquí donde se descubrió el agujero de la capa de ozono.
Es una de las pocas bases que están ocupadas todo el año, y se dedican a investigaciones de geofísica, meteorología y de la ionosfera.
Uno de los mayores atractivos de esta base es su pub, uno de los mejores de la Antártida:
Estuvimos hablando con algunos miembros del equipo de la base y les preguntamos si habían visto auroras australes durante el invierno, pero nos dijeron que no, ni una sola: siempre había estado nublado. Y debía ser cierto, porque nos enseñaron unas magníficas fotografías que habían realizado durante todo el año y en ninguna aparecía una aurora.
A continuación nos dimos una vuelta en la zodiac por los alrededores, y coincidimos con los participantes en la excursión en kayak:
Una de las cosas que más nos llamó la atención fue el corte vertical de un glaciar, donde se apreciaban extrañas coloraciones rosadas, debidas a los excrementos de los pingüinos, que se van comprimiendo con la nieve que cae cada año:
El día finalizó con una actividad muy curiosa: acampada en la Antártida. Algunos de los viajeros marcharon, después de cenar, hacia un islote cercano para montar las tiendas y realizar una acampada en tan remoto lugar. Nosotros no participamos, pues ya estaba completo el grupo cuando contratamos el viaje y porque ya habíamos realizado esta actividad en el Ártico, pero nuestro amigo Xavier sí participó y nos ha dejado compartir con vosotros estas fotografías del campamento:
La actividad solo consistía en dormir, pues no está permitido hacer fuego. Por eso, a la mañana siguiente, muy temprano, recogieron todo para desayunar en el barco con nosotros.