sábado, 25 de diciembre de 2010

Qeqertarsuaq

15-Agosto-2010
Lo bueno de viajar en Verano por encima del Círculo Polar Ártico es que tienes muchas horas de luz para fotografiar; lo malo es que tienes pocas horas para dormir. Hoy nos hemos despertado pronto y como hemos visto que hacía un día espléndido, nos hemos ido a cubierta a practicar nuestro deporte favorito: "cazar" aves marinas. No es fácil, porque vuelan muy rápido, pero con un poco de práctica aprendes a adivinar su trayectoria, e incluso la altura a la que van a pasar cerca del barco. Eliges una cubierta y esperas a que pasen, con la cámara preparada con la exposición correcta, y estos son algunos de los resultados que obtenemos:



Cuando ya conseguimos que nos salgan centrados y enfocados, buscamos efectos más artísticos, jugando con las formas y colores del mar:


Después del desayuno nos dirigimos a Qeqertarsuaq, que fue la ciudad más importante al norte de Nuuk hasta 1950. Es una de las ciudades Groenlandesas que todavía conserva la atmósfera colonial Danesa (su nombre en Danés es Godhavn, que significa "buen puerto").

Para entrar a la ciudad desde el puerto, tenemos que pasar por debajo de un curioso arco construido con huesos de ballena:
El día es magnífico (quizá demasiado caluroso) así que damos un agradable paseo por la ciudad y su museo. Pero el objetivo de hoy está un poco más lejos, pues estamos en una zona volcánica con interesantes formaciones geológicas. Al salir de la ciudad podemos admirar una bonita vista de sus casas de vivos colores, pero lo que más llama mi atención es un iceberg varado muy cerca de la costa, que se puede contemplar tranquilamente desde un banco público:


Y la escena de ese mismo iceberg visto a través de una portería de fútbol:


Seguimos nuestro camino bajo un sol cada vez más implacable, que incita a los mosquitos a salir de sus escondrijos para molestar a los viajeros. Mientras nos debatimos entre quedarnos en manga corta para combatir el calor o no quitarnos la ropa para no ser atacados por los mosquitos, llegamos a nuestro objetivo, Kuannit (69º 15'N  53º 26' W): unas formaciones espectaculares de rocas basálticas y regueros de agua, que en algún momento nos recuerdan paisajes de latitudes mucho más meridionales:




Como he dicho al principio, lo malo de estos viajes es que el día es muy largo. Y hoy ha sido realmente largo, porque después de cenar subimos a cubierta por si logramos ver esos anocheceres que figuran en los libros de Groenlandia, y ¡tenemos suerte! Hacia las 12 de la "noche" el cielo se enciende en fuego:


Y, lo mejor de todo, pasamos cerca de unos icebergs de formas imposibles, que se iluminan con la luz del crepúsculo para formar una bonita escena de colores cálidos y fríos:


Esto es justo lo que estábamos esperando ver, aunque los icebergs pasan muy rápido y apenas tenemos tiempo de hacer unas pocas fotos con la luz y composición correctas. Ha sido un día muy largo, pero repleto de experiencias e imágenes inolvidables.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Sisimiut

14-Agosto-2010
Hoy hemos iniciado el verdadero viaje de exploracíon, visitando la ciudad de Sisimiut, la segunda ciudad más grande de Groenlandia. Habia oido hablar mucho de esta bonita ciudad, que todavía mantiene el aspecto de un pequeño pueblo de pescadores. Se encuentra a 75 Kms al Norte del Círculo Polar y es la ciudad más al Norte que mantiene el puerto libre de hielo durante todo el año.


Como todas la ciudades del Ártico sus casas son pequeñas, de madera, pintadas de vivos colores. Disfrutamos de un tour en autobús guiados por una joven local, de padres Inuit y Daneses, que nos ofreció una interesante explicación sobre la historia de la ciudad y la forma de vida de sus habitantes. Tenía un aspecto alegre y una complexión fuerte, típica de los Inuits, y su belleza la podéis apreciar en esta foto realizada por Theresa:

Nos explicó que ella, como buena groenlandesa, es una gran cazadora, y suele ir a menudo con su trineo de perros a cazar. Los perros son un animal imprescindible para los groenlandeses, pues los utilizan para sus desplazamientos en trineo durante el invierno. Los suelen tener atados en las afueras de la ciudad, para prevenir incidentes con niños y turistas, aunque los cachorros sí están sueltos. Son unos perros magníficos, muy fuertes y resistentes. Tuvimos la oportunidad de ver los suyos muy de cerca, algo que no se debe hacer con perros desconocidos, pues podrías tener un serio disgusto (por eso están atados).


La caza es parte fundamental de la forma de vida en Groenlandia, pero solo cazan lo que necesitan, nunca por placer. El año pasado no llegaron a consumir el cupo asignado de ballenas, pero es que no necesitaron cazar más. Tienen un gran respeto hacia la Naturaleza, y siempre le dan gracias después de cobrar una presa.

Sisimiut tiene un museo muy interesante, con numerosas herramientas, reliquias y arte local, así como algunas reconstrucciones de casas tradicionales.


Por la tarde realizamos un desembarco en Qimatuilyigssuaq 67˚09’N 53˚51’W) un bonito lugar en Frederik IX Land. 


Tuvimos la ocasión de disfrutar de un tiempo magnífico, y de realizar un paseo por la zona.  Nos dividimos en varios grupos, en función de la distancia que cada uno quería recorrer. Nosotros nos quedamos muy cerca, para poder hacer fotos tranquilamente.


Siempre nos han llamado la atención las plantas de algodón ártico, y en este lugar pudimos dedicarnos a fotografiarlas con calma.


Por supuesto, esto es una expedición, y tuvimos que atravesar peligroso torrentes de aguas heladas, como podéis ver en este video:



El día terminó con una bonita puesta de sol, que disfrutamos en la cubierta del barco, pensando el todo lo que todavía teníamos por delante en este viaje. Habíamos visto muchas fotografías de puestas de sol sobre icebergs, con bellos contrastes de colores fríos y cálidos, pero aquí no había ningún iceberg, así que nos conformamos con un barco que pasaba por allí:

martes, 7 de diciembre de 2010

Embarcando

13-Agosto-2010
Hoy es el día en el que empezamos el crucero. Después del largo día de ayer hemos querido descansar y nos hemos tomado con calma el delicioso desayuno del Polar Lodge, aunque no con demasiada calma pues tenemos que dejar la habitación antes de las 9:00.

Hemos quedado en el aeropuerto a las 13:30 para reunirnos con el resto de los viajeros, así que durante toda la mañana hemos paseado tranquilamente por Kangerlussuaq y hemos tomado un pequeño almuerzo. A la hora prevista nos hemos dirigido al aeropuerto, a unos 200m del Polar Lodge. Mientras esperábamos se ha parado un autobús y han descendido dos hombres que nos resultaban familiares: eran Phil y Chris, dos miembros de la expedición a la Antártida que hicimos en Febrero. Phil viene a este viaje como líder de la expedición, y Chris viene como siempre, como médico, confiando en no tener que emplear sus conocimientos. Ya es casualidad que nos volvamos a encontrar otra vez en el Ártico.


El barco que vamos a utilizar en esta expedición es el Akademik Shokalskiy. Es un barco pequeño, para 48 pasajeros, que se utilizó para misiones científicas antes de utilizarse para el turismo. Nos gustan los barcos pequeños: los desembarcos se realizan con más rapidez, y el ambiente es más de "expedición".

Esta vez tenemos un camarote de lujo, pues Quark nos hizo un upgrade para compensarnos por ciertos problemas que tuvimos con ellos durante la reserva. Bueno, quizá no es adecuado hablar de lujo sino de espacio, pues el barco es más bien "espartano", pero el espacio extra se agradece. Una de las cosas que más nos llaman la atención son las escotillas: tenemos tres en nuestro camarote y dos de ellas se pueden abrir. Pero ninguna cierra bien y tienen una toalla en la parte inferior, supongo que por si entra agua. ¡Espero no tener que utilizar las toallas!

Tenemos un gran escritorio con un radiador eléctrico debajo -un sitio poco acertado- que funciona de vez en cuando. Y el baño es el típico de estos barcos, pequeño pero bien aprovechado.
Este camarote será nuestro hogar durante los próximos 12 días.


Por la tarde realizamos las típicas tareas de repartir las botas, conocer el barco, comprender las medidas de emergencia, el procedimiento para utilizar las Zodiacs, etc. Después de cenar salimos a ver el anochecer por el fiordo Sondrestrom, pues hace una buena temperatura y el agua está muy tranquila.



jueves, 18 de noviembre de 2010

Atracciones de Kangerlussuaq

12-Agosto
Debido a problemas con la disponibilidad de vuelos hemos tenido que venir a Kangerlussuaq un día antes de lo necesario. Pero no ha sido un problema, porque hacía mucho tiempo que teníamos ganas de ver unos animales muy interesantes que viven aquí en libertad: los Musk Ox (Ovibos moschatus). Estos grandes mamíferos fueron exterminados en Groenlandia, pero en el siglo XX fueron re-introducidos con éxito. En Kangerlussuaq viven unos 4.000 ejemplares que se han adaptado muy bien, pues esta zona, al estar muy alejada de la costa, recibe poca cantidad de nieve, y pueden encontrar hierba para comer en invierno sin necesidad de escarbar mucho en la nieve.
Viven en absoluta libertad, pero son muy desconfiados, pues está permitida su caza. Nosotros contratamos un guía para que nos llevara a los lugares más propicios para verlos, y tuvimos suerte, porque vimos unos impresionantes ejemplares muy cerca.



En esta época del año ya empieza el Otoño, y los arbustos empiezan a pintarse de vivos colores:


Para aprovechar el día decidimos contratar la otra actividad típica de este lugar: una excursión al Inlandis. El Inlandis es la capa de hielo que cubre todo el interior de Groenlandia, y que es fácilmente accesible desde Kangerlussuaq por un largo camino de tierra. Si tienes suerte puedes verlo desde el avión cuando llegas a Kangerlussuaq:



Para el transporte se utiliza un vehículo 4WD con amplias ventanas; tiene la ventaja de la gran visibilidad, pero solo se pueden abrir las dos ventanas de delante, por lo que, si viajas en un día soleado, puede hacer demasiado calor en el interior. Nosotros tuvimos suerte, porque la tarde era luminosa pero fresca.


Durante el viaje realizamos muchas paradas para fotografiar los abundantes lagos y las espléndidas vistas del glaciar Russell.




Llegamos al Inlandis un poco antes del anochecer, y pudimos disfrutar de la luz rasante del sol sobre esa enorme extensión helada, casi infinita. Este es el lugar desde donde parten las expediciones que cruzan el Inlandis y llegan hasta la costa Este, tras más de 20 días de travesía.

Estuvimos disfrutando de este paisaje poco tiempo, pues empezó a oscurecer rápidamente y todavía teníamos que volver. Sin embargo nos dio tiempo a parar unos minutos frente a un glaciar, donde el guía nos ofreció una galletas con café o te caliente, que recibimos con gran entusiasmo pues ya empezaba a bajar sensiblemente la temperatura.

Durante el camino de vuelta pudimos ver algunos animales de la zona, como una enorme liebre ártica y estos caribúes, fotografiados a través del cristal:Llegamos al hostal casi a medianoche, tras un día muy intenso y muy largo (Groenlandia tiene 4 horas de diferencia con Copenague). Mañana empieza el crucero, la verdadera aventura ártica de este año.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Castillo de Frederiksborg

11-Agosto-2010
Hoy ha amanecido nublado, con riesgo de lluvia, nada que ver con el día soleado de ayer. ¿Qué se puede hacer en un día lluvioso? Pues visitar museos. Uno de los más cercanos a Copenhague es el castillo de Frederiksborg, en la ciudad de Hillerød.

Tomamos un tren para llegar a Hillerød; afortunadamente el transporte público funciona estupendamente y llegamos puntualmente sin ninguna dificultad.
El castillo es impresionante, situado a la orilla de un lago, con un bonito jardín: desafortunadamente el cielo nublado no queda bien en las fotos por lo que nos dedicamos a fotografiar detalles del exterior:


Este castillo fue construido entre 1560 y 1630, y se le considera la mayor representación del renacentismo danés.
Pasamos el día paseando por sus amplias habitaciones y largos pasillos, disfrutando de sus pinturas y demás objetos artísticos.


Me llamaron la atención dos cosas: las paredes de la iglesia del piso superior estaban repletas de escudos de armas de casi todos los países. Este de Islandia me gustó por su lema:

La otra cosa que me gustó fueron las mesas dispuestas con alimentos en los comedores, tan bien hechos que casi parecían reales:

Por supuesto, todo palacio tiene sus jardines. En este caso tuvimos que esperar varias horas para que dejara de llover, pero pudimos disfrutar de un agradable paseo, acompañados del olor a tierra mojada y el suave sonido del agua de las fuentes.

A la salida del jardín vimos varias aves acuáticas, algunas de ella pescando para sus polluelos:

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Escala en Copenague

10-Agosto-2010
Existen varios caminos para ir a Groenlandia; uno de ellos es haciendo escala en Dinamarca. Nosotros elegimos pasar unos días en Copenague antes de volar a Kangerlussuaq.
Copenague es una ciudad moderna, donde nos han sorprendido varias cosas: la primera, la cantidad de bicicletas que circulan por la ciudad. Ciudadanos de todas la edades circulaban tranquilamente en bicicleta, sin ningún problema, con gran respeto entre los automóviles, los ciclistas y los peatones. Especialmente sorprendente es el hecho de que dejan las bicicletas en la calle sin cadenas, demostrando un civismo al que no estamos acostumbrados en los países del sur de Europa.

Otra cosa curiosa son los hombres anuncio: están en las calles peatonales, de pie o sentados, sujetando un cartel publicitario que anuncia, normalmente, un restaurante:

Tuvimos la suerte de disfrutar un día soleado, donde la ciudad se llena de personas paseando y disfrutando de la tranquilidad de las calles apartadas,

y de las bulliciosas zonas turísticas:

En un día cálido y soleado como este decidimos subir a lo alto de la iglesia de Nuestro Salvador, desde donde se disfrutan unas espléndidas vistas aéreas de la ciudad a 90 metros de altura.

Se sube andando, por unas escaleras de madera muy estrechas, donde no pasan dos personas a la vez. Y son muchas escaleras así que viene bien el tener que parar de vez en cuando para dejar pasar a otros visitantes.
Con esta luz tan bonita nos fuimos al puerto, donde encontramos mucha gente observando los barcos que allí se encontraban, algunos de gran belleza:

Un bonito día de paseo, justo lo que necesitábamos para comenzar nuestras vacaciones.