lunes, 11 de julio de 2011

Hacia El Chaltén

17-Abril-2011
Hoy nos hemos despedido de Las Torres y nos hemos dirigido a El Chaltén, nuestro próximo objetivo. Hemos tenido que madrugar, pues es un largo camino que nos llevaría todo el día. Así que bajo un cielo encapotado y un fuerte viento que acentuaba la sensación de baja temperatura, nos dirigimos hacia la salida del parque.

Tuvimos la suerte de ver muchos cóndores alzando el vuelo en una roca cerca de la carretera, que aprovechando el viento emprendían el vuelo con facilidad.

Por supuesto, vimos cientos de guanacos, por todos sitios, incluso cruzando la carretera y los ríos.

Un poco después de salir del parque nos encontramos a un carancho alimentándose de un cadaver de guanaco justo en la orilla de la carretera.

Siguiendo las normas éticas de fotografía de naturaleza, nos paramos a 200m para no alterar mucho su comportamiento y poder ver con claridad cómo se alimentaba. Lamentablemente, los automóviles que pasaban por la carretera se paraban justo al lado del ave, que huía rápidamente, asustada.

Fue un día cansado, por lo lago del viaje, con mucho recorrido sobre carreteras de tierra.

De paseo por el parque

16-Abril-2011
Hoy hemos tenido un dia nublado y ventoso, y hemos aprovechado para ver algunos saltos de agua y para buscar vida salvaje. El amanecer ha sido bastante "flojo", pues las nubes no permitieron que el sol iluminara las torres.

Visitamos los saltos de agua más importantes: el Salto Chico situado junto a un moderno y caro hotel:

Donde tuvimos la suerte de ver a un zorro en la puerta trasera de la cocina, esperando un poco de comida "fácil".

Desde este hotel se disfruta de unas vistas espectaculares del macizo de las Torres:

En el parque hay pocos lugares donde comer, uno de ellos en el hotel del lago Pehoe, así que allí fuimos para disfrutar de un agradable almuerzo con "vistas".

Por la tarde nos dirigimos al Salto Grande, pero hacía mucho viento y no era agradable salir del automóvil.

Afortunadamente el viento se fue calmando y tuvimos la oportunidad de ver muy cerca un pequeño grupo de guanacos, aunque siempre a una distancia prudente, pues son animales salvajes y pueden ser peligrosos si se enfadan.